domingo, 6 de noviembre de 2011

Cómo superar una entrevista de trabajo


Cuando acudimos a una entrevista de trabajo importa mucho la primera impresión, nuestra imagen, es nuestra carta de presentación, por lo que a la hora de acudir a una cita de este tipo, debemos cuidar al detalle todo lo que comunique acerca de nosotros.

Una entrevista de trabajo es una primera toma de contacto donde se busca a parte de conocer nuestro perfil profesional y formación, averiguar otros aspectos de nosotros como pueden ser habilidades, intereses, personalidad, forma de actuar... en definitiva, aspectos personales para identificar si somos compatibles con el puesto que se ofrece y con la empresa.

Antes de acudir a una entrevista, es importante prepararse. Primero tenemos que empezar por nosotros, hay que tener claro quiénes somos y por qué o para qué acudimos a ese trabajo, además tenemos que ser conscientes de nuestro puntos fuertes y puntos débiles y sobre todo, hacer un repaso de los documentos entregados al empleador, así como llevar los títulos que lo acrediten (aunque no debemos mostrarlos si no se nos piden), debido a que es habitual que realice preguntas sobre algunos puntos que les hallan llamado la atención. Algunas de las preguntas más frecuentes (aunque no son fijas, siempre pueden sorprendernos) son : ¿Por qué cesaste en el anterior trabajo? ¿Por qué quieres cambiar de empresa?, ¿Qué funciones desempeñabas? ¿Qué aprendiste durante tus trabajos anteriores?, etc. Cuanto más nos preparemos mejor, por lo que aparte de pensar en las preguntas que nos pueden hacer, también podemos pensar en las preguntas que queremos hacer. No obstante, hay ciertos temas por los que no debemos de preguntar, como pueden ser cuestiones acerca del salario, las vacaciones y el horario, son preguntas delicadas que es mejor dejarlas (si no sale el tema). Si están interesados en ti ya tendrás la ocasión de averiguarlo porque en la primera entrevista hay que tratar de causar una buena impresión, por lo que tampoco es preciso hacer ningún comentario negativo acerca de tu antiguo trabajo o algún compañero porque transmitirás que no eres una persona de fiar.

Sobre todo, debemos nutrirnos de toda la información posible sobre la empresa a la que acudimos, su política de empresa, su filosofía, aspectos importantes del sector en el que opera,etc. Al empleador le gusta que conozcas la empresa, que sepas donde estás y que demuestres que estás interesado en trabajar ahí.

Se le da mucha importancia a la forma de expresarnos y a nuestra reacción ante las cuestiones que nos plantean. Pero hay aspectos que también comunican acerca de nosotros y que no atienden a la comunicación verbal; se trata, de la comunicación no verbal que engloba tanto gestos, como la postura o el tono de voz y que es muy importante controlar puesto que en algunos casos puede darse más importancia a este tipo de comunicación que a la comunicación verbal. Para controlar esto, podemos ensayar en casa delante de un espejo con el fin de mejorar nuestra comunicación no verbal.

Otro aspecto a destacar es la vestimenta, es fundamental cuando vas a acudir a una entrevista, y hay que adecuarla dependiendo al sitio o tipo de empresa a la que acudas, debe de encajar con la imagen que espera la empresa de un trabajador; si no tenemos idea de cómo ir vestidos, no tenemos más que indagar siempre que sea posible acerca de la forma de la que visten los trabajadores de la empresa.

Por último, cuando termine la entrevista podemos preguntar cuando podemos saber los resultados, pero en ningún caso mandar emails o llamar para preguntar constantemente; y en caso de que la respuesta sea negativa, hay que ser correcto, tal y como están las cosas ¡no nos podemos cerrar ninguna puerta para el futuro!





No hay comentarios:

Publicar un comentario